En el país, actualmente 400 notarías están en proceso de implementación de tecnología para que la firma de escritura e hipoteca se realice digitalmente.
Con esta implementación, se busca que para finalizar el año se realicen más del 50 % de las transacciones de compra y venta de vivienda usada de manera online.
Según Sebastián Noguera, co-fundador de Habi “la pandemia está teniendo un efecto muy importante en todo esto, los usuarios quieren hacer todo el proceso más digital y eso nosotros lo hemos visto desde Habi”.
“La gente quiere hacer estos trámites desde la casa, sin tener que acercarse a la notaría, sin actos presenciales. Esta adopción de la tecnología en todos los procesos ayudará para que cada vez sea más rápido y podamos cerrar el año con más del 50 % de las transacciones por internet”, añadió
La plataforma se convirtió en el primer comprador y vendedor de vivienda usada con escrituras e hipoteca digital. Por esta razón, Habi explica el paso a paso para realizar estas transacciones en línea.
¿Por qué surge esta iniciativa?
Normalmente, para realizar la escrituración es necesario acudir a la oficina de notariado y registro para solicitar información.
En el caso de la hipoteca, se debe tramitar la solicitud con bancos e involucrados en el proceso para acceder a un crédito.
En este proceso, se deben diligenciar y entregar los documentos pertinentes en físico; un proceso manual, con varios jugadores en el ecosistema, que toma varios días.
Por esta razón, el Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio (Minvivienda) viene liderando este proceso histórico con el objetivo de digitalizar estos procesos, lo que brindará a la industria de bienes raíces grandes beneficios en términos de costos y tiempo.
¿Cómo se va a digitalizar este proceso?
La necesidad inicial era digitalizar la validación de la identidad del usuario. Hace aproximadamente tres años, la banca comenzó a implementar diferentes mecanismos que permiten verificar la identidad digitalmente, a través de firma digital y otros que permiten confirmar que el usuario es quien dice ser.
Por otra parte, las entidades financieras ahora pueden conocer en línea la capacidad de pago de las personas. También pueden hacer un chequeo de ingresos y el riesgo de crédito, para otorgar un aprobado completamente en línea.
Esto se logra hoy gracias a la conexión y la posibilidad de que si el cliente aprueba la consulta, las entidades financieras pueden averiguar la información que se necesita para saber si una persona específica puede acceder a un crédito.
El siguiente punto a tener en cuenta es realizar el estudio de la vivienda para entender a profundidad el activo.
Para esto existen actores del sector inmobiliario como Habi que han sido importantes en la automatización de este proceso.
La plataforma colombiana, que compra y vende viviendas en procesos hasta 30 veces más rápido, ha recopilado toda la información que permite ponerle precio a cualquier inmueble en tiempo real.
Transformó los procesos para hacer de ésta una transacción sencilla en donde el cliente puede realizar todo el proceso desde casa, desde el registro hasta los trámites notariales. Ahora, también el proceso digital de escrituración.
Para lograr completar la transacción, la Superintendencia de Notariado y Registro se encuentra en la fase de verificación de los requisitos técnicos de las notarías del país que entrarán en el proceso de digitalización notarial.
¿Dónde se realizó el proceso de digitalización de las firmas?
En Medellín, en la Notaría 25, se realizó la integración completa del proceso en línea, desde la construcción de la minuta para la base de la escritura pública, la recolección de todos los documentos para la transacción, la validación de la identidad por parte de la notaría, hasta la firma.
Para realizar este proceso histórico, por primera vez en la capital Antioqueña se reunieron en la notaría, el Ministerio de Vivienda, junto con entidades bancarias como Bancolombia, Davivienda y Banco de Bogotá, y actores del sector vivienda como Habi, para llevar a cabo la firma digital de hipoteca y escrituras.