Seguramente muchas veces has escuchado hablar de las agencias inmobiliarias, y aunque tal vez conozcas a nivel superficial de qué se trata, desconoces cómo funcionan y cuáles pueden ser los beneficios de contar con una a la hora de alquilar, vender o comprar un inmueble.

Una inmobiliaria es un negocio dedicado a la compra y venta de inmuebles (casas, locales comerciales, terrenos, fincas, etc). Por este motivo, en ocasiones se habla de la gestión inmobiliaria, es decir, el conjunto de operaciones relacionadas con esta actividad.

En este sentido, el trabajo de un agente inmobiliario consiste básicamente en representar a clientes, específicamente bajo cuatro modalidades:

  • El vendedor: la persona que está interesada en vender su inmueble.
  • El arrendador: al dueño legal de una propiedad (por ejemplo, quien posee un local y quiere alquilarlo).
  • El comprador: quien tiene el propósito de adquirir una propiedad para algún fin.
  • El arrendatario: quien pretende utilizar un inmueble durante un periodo determinado.

Ante cualquier negocio, el agente será el intermediador, lo que puede ser de gran utilidad, tanto para el comprador como para el vendedor, debido a que hay una cantidad significativa de gestiones y trámites relacionados con estas operaciones y la inmobiliaria se dedica a su tramitación como parte de sus servicios.

Principales beneficios de una inmobiliaria

1. Ahorro de tiempo

Como lo mencionamos antes, existe una cantidad considerable de trámites al momento de alquilar o comprar un apartamento, tanto para el que oferta el servicio como para quien lo toma, por eso, uno de los mayores beneficios de contratar una agencia inmobiliaria es el ahorro de tiempo, pues su función es gestionar los trámites administrativos para que no tengas que preocuparte por hacer filas ni documentos.

Además, te ahorrarán el tiempo de mostrar el inmueble, y esto en ocasiones puede tardar semanas, e incluso meses.

2. Asegura el cumplimiento de términos

En el caso de arrendar un apartamento o estar interesado en comprar una casa, la inmobiliaria se encargará del cumplimiento de los términos: pago de arriendo, administración y servicios públicos, firma del contrato o pago de la totalidad del valor del inmueble.

3. Seguridad

Debido a que las inmobiliarias tienen convenios con las aseguradoras, en caso de incumplimientos de alquiler, administración, y servicios públicos por parte del arrendatario, no tendrás que preocuparte, la aseguradora cubrirá todo y tu dinero llegará sin contratiempos.

4. Asesoría

En muchas ocasiones, por desconocimiento, algunas personas fijan precios muy elevados o muy bajos a sus inmuebles, por lo que podrían perder dinero o tardar años en alquilar o vender una propiedad. Mediante avalúos, la inmobiliaria te permitirá definir el precio justo y real para el beneficio de todas las partes.

5. Cartera de clientes

Las agencias inmobiliarias cuentan con una base de datos de personas interesadas en comprar o alquilar propiedades.  En esa base de datos muchas veces hay características de lo que se busca, por lo que, si tu inmueble es de un piso y tres habitaciones, y en la base de datos hay una o varias personas que buscan algo así, será mucho más fácil vender o arrendar.